La Entidad de Conservación del Arroyo de la Vega aprueba iniciar la cuenta atrás para su disolución
La Entidad de conservación del Arroyo de la Vega celebró en la tarde del lunes, 13 de julio su Asamblea General Ordinaria en un salón del hotel Amura. Esta asamblea iba a celebrarse el pasado mes de marzo y tuvo que suspenderse a causa del Coronavirus.
Aprobación de cuentas
Durante el transcurso de la jornada, el Consejo Rector de la entidad aprobó las cuentas del ejercicio en curso y el montante gastado el ejercicio anterior.
Antes de proceder a la votación y como es costumbre en este tipo de asambleas, el Presidente de la Entidad de Conservación, José Antonio Amezaga, repasó las partidas gastadas en diferentes apartados para realizar las tareas de mantenimiento del Arroyo de La Vega.
Ambos puntos fueron aprobados por unanimidad de los presentes, que representaban a casi el 45% de los propietarios de este espacio geográfico.
El Presidente también dio cuenta de la situación contractual con las empresas que la Entidad de Conservación contrata para la prestación de servicios.
Además y como en casi todas las Asambleas también se analizó el convenio con el Ayuntamiento, cuya subvención en 2019 ha tenido una cuantía de 107.497.81 euros, mismo montante que el año anterior y similar al que recibirá en 2020.
Inicio de trámites para la disolución de La Entidad
Una vez se votaron las cuentas, el cónclave entró a debatir el punto más interesante del orden del día, iniciar los trámites para aprobar la disolución de la Entidad en 2021. Concretamente, el 25 de enero del año próximo, fecha que marcan sus estatutos.
En el debate de este punto del orden del día tomó la palabra Aitor Retolaza(Cs), representante ocasional del Ayuntamiento, ya que Rogelio Mallorquín, concejal (PSOE) de Recursos Humanos, es el oficial y no pudo asistir.
Retolaza es el Concejal de Seguridad y del Distrito Urbanizaciones. En su intervención abrió la mano del Ayuntamiento a iniciar un diálogo donde se pueda negociar de la manera más amistosa posible la futura disolución de la Entidad de Conservación.
El Ayuntamiento de Alcobendas representa al 23% de las propiedades y su intención es, como dijo el concejal, cumplir, si es lo se tiene que hacer, con los estatutos, pero de la mejor manera posible.
En este sentido, tanto Aitor Retolaza como el Presidente de la Entidad si manifestaron su conformidad para entenderse y poder llegar a un acuerdo para que de manera progresiva y tratando de perjudicar lo menos posible a los vecinos y empresas del Arroyo De la Vega, ir asumiendo por parte del Ayuntamiento las competencias, tareas y labores que realiza y supervisa la Entidad de Conservación.
Lo que si pareció quedar claro es que la Entidad de Conservación votará su disolución pero entrará entonces en la fase de liquidación de funciones, etapa más extensa y que puede durar, sería lógico, entre dos y tres ańos.
Esta pelota de las fechas y plazos esta ya en el tejado de los servicios jurídicos del Ayuntamiento de Alcobendas, que serán los que marquen los hitos en el camino del proceso a seguir.
Más empresas que vecinos
El Arroyo de La Vega es una urbanización con ciertas singularidades. La más plausible es que es la única del distrito donde hay más empresas que vecinos. Su zona empresarial es de las más valorada de Alcobendas y en sus recovecos se asientan multinacionales y grandes empresas.
Este dato es importante pues puede surgir cierta disparidad de criterios entre un residente que paga una cuota baja y puede ver la Entidad como necesaria y empresas como Alcampo o Diversia, por poner un ejemplo, con grandes extensiones de terreno, una cuota elevada, y que considere que es un ahorro a sus arcas de un dinero que como dijo Carmen Arias, vicepresidenta del Consejo Rector y representante de Heron Diversia, revertiría de otras formas en la urbanización y la ciudad.
En definitiva, el Consejo Rector aprobó ayer iniciar un camino que acabará en en la disolución de la Entidad de Conservación, como dicen sus estatutos que se haga. El tiempo dirá cuando.