Tener mascotas en casa beneficia la salud
No sólo nos hacen compañía, que ya es mucho, sino que diversos estudios llevados a cabo en importantes universidades han llegado a la conclusión de que tener animales en casa también puede aportarnos grandes beneficios para el organismo, tanto a nivel físico como mental, independientemente de la edad que tengamos, hasta el punto de que pueden reducir el riesgo de mortalidad.
Doctora Blanca Rodríguez Ayala
Perros, gatos, peces, roedores… a todos se les coge cariño rápidamente, y casi siempre terminan por convertirse en “uno más de la familia”. Eso sí, todo tiene que empezar por adquirir un compromiso verdadero para su cuidado manteniéndoles limpios, con las vacunas al día, lavándose bien las manos después de estar en contacto con ellos, y vigilando a los niños cuando interactúen para evitar peligros.
A partir de ahí, si no hay ningún tipo de alergia ni contraindicación, todo pueden ser ventajas:
- Mejoran el estado de ánimo. Aunque no curan la depresión, sí proporcionan compañía y consiguen que seamos más positivos de cara a lo que nos hace sentir tristes, aumentando el sentimiento de felicidad.
- Disminuyen la ansiedad. Se ha comprobado que convivir con animales baja los niveles de cortisol, que es la “hormona del estrés”.
- Fomentan las relaciones sociales. En el caso de los perros, sacarles a pasear hace que conozcamos gente que lleva la misma rutina que nosotros en los parques, además de ser una excusa perfecta para entablar conversación preguntando, por ej. por los hábitos de la mascota del otro.
- Refuerzan el sentido de la responsabilidad. A los animales hay que cuidarlos, darles de comer, mantenerlos aseadas… en definitiva, hay que establecer unas rutinas y hábitos que hacen que nuestro sentido de la responsabilidad sea mayor, lo cual puede ser muy favorable en el caso de los niños que aún no tienen inculcado este hábito.
- Ayudan a mejorar el estado físico. Sacarles a pasear es un acto repetitivo, rutinario, que hace que nuestra vida no sea tan sedentaria, lo que se traduce en una mejora de la condición física.
- Refuerza la autoestima. Ver cómo las mascotas crecen sanas y felices es una forma de hacernos ver que nuestro esfuerzo y dedicación hacia ellas tiene su recompensa, proporcionándonos también un sentimiento de orgullo.
- Aunque no pueden considerarse un sustituto de las relaciones humanas, su compañía disminuye el sentimiento de soledad en quienes no viven acompañados haciendo que determinados momentos sean más llevaderos.
- En algunos casos, por medio de organizaciones específicas, a los perros se les lleva a hospitales y residencias como terapia para los pacientes que tienen enfermedades crónicas graves, pues se ha visto que puede ayudarles a reducir el estrés y a manejar el dolor. Aún en estudio, hay evidencias de que incluso pueden ayudar a las personas diabéticas a controlar sus niveles de glucosa así, Dogs for diabetics, es una asociación dedicada a entrenar a estos animales con dicho fin.