Opinión

Partido Popular: Renovada ilusión y ….experiencia

Isabel Díaz Ayuso es una líder hecha a sí misma. Hay líderes efímeros que nacen de un cartel bien promocionado, de una imagen bien vendida, de una ocurrente foto en desnudo con las vergüenzas entre las manos o en figura de caballero a las riendas de un caballo; ora márquetin de liberales que decían venir a renovar la democracia, ora arenga apasionada que se envalentona desde la barrera sin ponerse delante del toro. Líderes seductores del márquetin y las promesas, sólo promesas, que se quedan en éstas.
Ramón Cubián

Incluso hay personas que se ponen o los colocan para ejercer un mando, que por más que están a la cabeza; liderar, lo que es liderar, nada lideran.

Isabel Díaz Ayuso, ni de estos ni de aquellos.

Nuestra líder, nuestra querida presidenta, eclosionó distinto. Desde la fuerza de su esfuerzo, desde el resultado trabajado, desde la firmeza de los principios defendidos a capotazos delante de un toro de mortales querencias.

Con un modelo de trabajo, una forma de gobierno, y un desparpajo espontáneo en la expresión que generó una inusitada y desbordante ilusión. Una ilusión que -con sello propio- proyectó su modelo y forma de gobierno, el del Partido Popular de la Comunidad de Madrid, mucho más allá de las propias siglas del partido… y mucho más allá de los propios límites de la región, poniendo en jaque al mismísimo gobierno de Sánchez, ese morlaco franquenstéin -peligroso mansón- que se desespera con los capotazos de la líder madrileña.

Desde ese su mérito ganado a pulso, se propuso -nos propuso- encabezar el cartel del PP regional… y generó afición; y generó ilusión… al tiempo que envidias de grisáceos mediocres. Novilleros del tres al cuarto -cuadrilla traidora- que, desde la gestora regional de Madrid, con algunos mayores de la dirección nacional, quisieron por la espalda provocar la cogida de la líder, dispuestos a sacrificar a la “maestra”. Y ordenaron silencio en sus gestoras y cuadrillas traidoras. Sin embargo, mientras algunos -traidores o equidistantes- callaron; otros alzamos la voz para defenderla en el impás de la embestida y a cara descubierta.

No pudieron con ella. Ayuso se volvió, toreó y en la suerte suprema, colocó el estoque en su sitio, en lo alto, en la yema. Cuando la querían muerta, ella dejó la puerta grande abierta. Para pasar ella y para pasar los grandes, sólo para los grandes como ella.

Ahora toca cartel nuevo, sin cuadrilla traidora. Sólo con leales, con trabajadores constantes y sin maquiavelos en sombras. De la mano de Feijóo, la dirección nacional se renueva. Un halo de lealtad que retorna, de ilusión, de liderazgo fajado en la tierra y en la experiencia.

En el congreso nacional eso es lo que toca.

Después vendrá el regional y, a continuación, las asambleas locales. Hora ya de poner fin a las gestoras de cuadrillas y a la endogénesis de las gestoras de gestoras.

Con ilusión renovada, renovar equipos, valorando esfuerzo, trabajo y experiencia. Fuertes en los principios y valores defendidos desde el albero y desde la calle. Equipos leales trabajando con lealtad por un proyecto, por un modelo de libertad y progreso para España, la Comunidad de Madrid y para Alcobendas.

De la mano de Feijóo y de Ayuso, el PP recupera su fuerza. En ello nuestro esfuerzo. Con ellos también aquí en Alcobendas nuestra meta.

Sabemos hacerlo y tenemos experiencia.

Ramón Cubián/Portavoz del Partido Popular de Alcobendas