Los campos en flor más bonitos de España al margen del Jerte
Estos meses dan paso a la temporada primaveral y el mundo se pinta de colores vibrantes. España está llena de preciosos cultivos que son una visita imprescindible.
LMN
Empieza la época del año en la que los colores vivos y los olores florales dan armonía al ambiente. Almendros, melocotoneros, cerezos o amapolas decoran nuestro país y muchos apasionados de la naturaleza los visitan cada año para disfrutar y admirar su belleza.
Campo de melocotoneros, Cieza (Murcia)
Los campos murcianos se visten de gala a finales de febrero para presenciar un evento único, la floración de Cieza. El melocotón de Cieza es el protagonista ya que es tal su fama que la localidad se ha convertido en el mayor productor de Europa con más de 300.000 toneladas de melocotones vendidas.
Con un color rosa inconfundible, este lugar ofrece al visitante una experiencia única en la que los olores, sabores y texturas de los melocotoneros acompañan a ciruelos y albaricoques en una espectacular alfombra primaveral.
Cerezos en flor, Valle de Caderechas (Burgos)
El frío clima de Burgos complica los cultivos, pero esta zona de la provincia tiene un microclima especial que permite que los frutales inicien la floración a principios de Abril. Los cerezos del Valle de Caderechas están dispersos por la zona y combinados con bosques de encinas y pinos resineros. Desde los pueblos cercanos se pueden ver las plantaciones de frutales que transforman en blanco el paisaje, y no por la nieve.
En esta zona de Burgos se pueden hacer numerosas rutas naturales en las que disfrutar de la naturaleza y de la belleza de estos campos de flores primaverales.
Amapolas y viñedos (La Rioja)
Donde los verdes campos de las viñas se unen con los vibrantes colores de las amapolas. Muy cerca de Cenicero, en La Rioja, nos encontramos con uno de esos enclaves que se quedan para siempre clavados en la memoria. Un lugar en el que destacan sus tierras rojas y privilegiadas para el cultivo que, en primavera, se convierten en uno de esos espacios en los que nos queremos quedar a vivir.
Las amapolas crecen donde menos te lo esperas, y una de sus peculiaridades más interesantes es que tienen dos épocas de floración, una a principios de abril con colores rojos intensos y otra a inicios de septiembre.
Frutales en flor, Aitona (Lleida)
¿Y si te decimos que puedes sentir que estás en Japón sin salir de España? Este lugar bien parecería sacado de una película de fantasía, pero existe, y está en Lleida. Los frutales empiezan a florecer en Marzo y las tierras de la zona de tiñen de rosa asombrando a todo el que la visita y logrando que se sienta en un paisaje que solo sería posible en la imaginación.
El municipio ha creado la iniciativa Aitona en Flor que organiza visitas guiadas por las fincas privadas de melocotoneros más impresionantes del 26 de febrero al 27 de marzo. Si lo que quieres es disfrutar de una vista única en el mundo, este es sin duda tu sitio.
Coloridos almendros, Quinta de los Molinos (Madrid)
No hace falta irse lejos para encontrar estas bellezas de la naturaleza, en la ciudad también se puede disfrutar de los impresionantes almendros en flor. El parque de Quinta de los Molinos, en Madrid, es una visita obligatoria en los meses de Marzo y Abril para apreciar el maravilloso espectáculo natural que esconde. Cuando el ruido y la velocidad de la ciudad agobian, este parque es un oasis en el que los almendros, y su gran variedad de flores invitan al descanso y desconexión.
Muy cerca de la calle Alcalá, este parque alberga un paisaje natural mágico, que te transporta lejos de la ciudad. Al caminar por su interior disfrutarás de la belleza de su gran cantidad de árboles de distintas especies como pinos, olivos, eucaliptos y sus espectaculares almendros.