Los álbumes de fotos dañados por la DANA serán restaurados por la Universidad de Valencia
La DANA, como todos sabemos, ha pasado dejado inundaciones, daños materiales y un profundo impacto emocional en las comunidades afectadas. La fuerza del agua ha arrasado en esta zona de España con viviendas y bienes personales.
LMN
En muchos casos las casas han quedado destrozadas y recuerdos irreemplazables que forman parte de la historia de las familias se han estropeado. La Universidad ha tenido una iniciativa solidaria que busca rescatar y restaurar gratuitamente los álbumes de fotos dañados por la DANA.
Este gesto no solo pretende preservar los recuerdos de los vecinos de la zona afectada de Valencia, sino también ofrecerles apoyo emocional.
“Sabemos que las prioridades en este momento, ante la situación catastrófica de la provincia de Valencia, se centran en el bienestar personal y el apoyo de infraestructuras y necesidades básicas de las familias. Sin embargo, las personas afectadas también se enfrentan al dolor que supone perder los recuerdos. Por este motivo, y de manera altruista, desde la UV se lanza una campaña para recuperar las fotografías familiares deterioradas por la reciente DANA”, explican desde la entidad.
Con la colaboración del Laboratorio de Análisis y Diagnóstico de Obra de Arte de la Universidad, expertos en restauración trabajarán minuciosamente para devolver a la vida las imágenes dañadas por el agua. Este equipo de profesionales utilizará tecnologías avanzadas y técnicas especializadas para recuperar las fotografías deterioradas y mitigar los daños causados por la humedad y las manchas.
El Vicerrectorado de Cultura y Sociedad lidera la iniciativa, que ya ha movilizado recursos y abierto un canal de comunicación con las familias afectadas. Aquellos interesados en restaurar sus recuerdos pueden contactar al área de Patrimonio de la Universitat de València a través del teléfono 686 788 721 o de los correos electrónicos patrimoni.cultural@uv.es y restauracion@uv.es.
La Universidad recomienda a las familias conservar las fotografías en bolsas etiquetadas con sus datos de contacto, como nombre, apellidos y dirección, para facilitar la identificación y organización de los materiales. Esta medida es fundamental para asegurar que las imágenes sean tratadas de forma óptima y devueltas a sus propietarios en el menor tiempo posible.