Movilidad

El Audi 80 celebra los 50 años de su nacimiento

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Con el primer Audi 80 lanzado en 1972, conocido internamente como “B1”,  la marca de Ingolstadt da en la diana: se convierte en el “Coche del Año”. Pretende ser “moderno, pero no un coche de moda”, un familiar fiable.
G. Pico Pérez

El ligerísimo Audi 80, que entró en producción hace 50 años, impresiona a los clientes por su comportamiento deportivo y su bajo consumo, lo que lo convierte, al comienzo de la crisis del petróleo de 1973, en el coche adecuado en el momento oportuno.

El Audi 80 y sus sucesores siempre han sido pioneros de grandes innovaciones. El TDI de cuatro cilindros, la tracción quattro con el diferencial central autoblocante, el cambio de doble embrague y el diferencial deportivo del eje trasero, sin olvidar los motores turbo de cinco cilindros, como en el primer modelo RS, son algunos ejemplos.

Diseño ligero y consistente y otras innovaciones técnicas

El modelo base con carrocería de dos puertas pesa sólo 835 kilogramos: la construcción ligera es una de las especificaciones establecidas por Kraus, responsable de Desarrollo Técnico. Con una distancia entre ejes de 2,47 metros y una longitud de 4,18 metros, la berlina fue diseñada para ser muy compacta. 

El motor del Audi 80 se coloca longitudinalmente delante del eje delantero motriz, con la caja de cambios de cuatro velocidades situada detrás. En el momento del lanzamiento al mercado hay cuatro motores, con cilindradas de entre 1,3 y 1,6 litros, y con potencias de entre 40 kW (55 CV) y 74 kW (100 CV). 

“Coche del Año 1972” y un auténtico éxito de ventas

Con la nueva generación de motores OHC y sus numerosas innovaciones técnicas, el Audi 80 se convierte rápidamente en un éxito de ventas para la marca de Ingolstadt. Hasta el final de la producción, en el verano de 1978, salió de la cadena de montaje más de un millón de modelos de la serie B1

El Asso di Picche, un prototipo de coupé diseñado por Giorgio Giugiaro y construido por el carrocero Karmann, demuestra el potencial deportivo del B1 ya en 1973. El Audi 80 GT pasa a la producción en serie en 1973, antes de ser reemplazado por el Audi 80 GTE en octubre de 1975; su motor tiene una potencia de 81 kW (110 CV). 

En 1976, el B1 recibe una actualización que dota a la berlina de grandes faros cuadrados, alineándola visualmente con la nueva generación del Audi 100. Ligero y con un bajo consumo, el Audi 80 se hace muy popular, especialmente tras la crisis del petróleo de 1973. El coche también es un éxito en EE.UU., donde se comercializa como “Fox”.