Charlie Under: «La comedia es una forma de contar historias»
Su mirada es como la del niño que descubre el truco del mago. Una mirada mordaz, pícara e inocente al mismo tiempo. La de alguien que sabe sacar punta con mucho humor a las miserias de la vida. Carlos Ramón Fernández (Madrid, 1985), conocido en el mundo de la comedia como “Charlie Under”, es de Alcobendas. Lo recalca siempre. Un entusiasta de la zona norte, donde empezó su vocación por “contar historias”. Monologuista intrépido, te lo encuentras en escenarios como La Estación Malasaña, el Picnic, el Beer Station o La Chocita del Loro de Madrid. Quizá también tomando algo por “el barrio”, como dice en esta entrevista sin desperdicio. Abrimos micro… ¡Bienvenido, Charlie Under!
Las Otras Miradas de Jorge García Palomo
Su mirada es como la del niño que descubre el truco del mago. Una mirada mordaz, pícara e inocente al mismo tiempo. La de alguien que sabe sacar punta con mucho humor a las miserias de la vida. Carlos Ramón Fernández (Madrid, 1985), conocido en el mundo de la comedia como “Charlie Under”, es de Alcobendas. Lo recalca siempre. Un entusiasta de la zona norte, donde empezó su vocación por “contar historias”. Monologuista intrépido, te lo encuentras en escenarios como La Estación Malasaña, el Picnic, el Beer Station o La Chocita del Loro de Madrid. Quizá también tomando algo por “el barrio”, como dice en esta entrevista sin desperdicio. Abrimos micro… ¡Bienvenido, Charlie Under!
¿Cómo te presentarías a ti mismo, Charlie?
Odio analizar quién soy porque me doy cuenta de que siempre soy una especie de figura de barro en medio de un cambio de forma. Soy una sirena que usa la cola de pez en la tierra y la cabeza de humano en el agua.
¿Y cómo te gusta mirar la vida, amigo?
Me gustaría mirar la vida con optimismo y ver solo las cosas bonitas, porque creo que lo merecen. Pero no puedo. Tengo una mirada crítica y afilada. Dentro de mí hay un viejo cascarrabias. Lo bueno es que sé contarlo usando chistes. Por eso soy más o menos soportable.
¿Qué significa la comedia para ti?
Es una forma de contar historias. Creo que toda persona con esa necesidad encuentra la forma de expresar lo que le pasa dentro. Con 14 años pintaba grafitis: era mi forma de contar historias y todavía hay muchos muros de Alcobendas con mi nombre. ¿La comedia? Yo encontré la comedia. O ella me encontró a mí, no lo sé.
¿Cómo has sobrellevado (en lo personal y en lo profesional) este drama del coronavirus (y ánimo por lo que nos queda)?
Muy mal, la verdad. He pasado coronavirus, mi mujer tiene secuelas todavía. He perdido todas las actuaciones que tenía programadas para 2020. En mi empresa (Hermético Escape Rooms) hemos tenido que cerrar un local. Se ha dejado todo el peso de la economía en manos de los caseros, y no tiene ningún sentido. Voy a acuñar un término: ¡”Caseropresores”!
Tú que llevas años “buscando la comedia”, usando el título de aquel documental estupendo sobre el gremio, ¿nos darías algún consejo para ser cómico? ¿Claves de un buen monólogo?
Ya no lo sé. Antes creía saberlo. Para mí, un buen monólogo es el que está hecho desde lo más profundo de tus entrañas. Si no te vas a dejar la piel en las tablas, no te subas. Pero supongo que eso es lo que me gusta ver a mí, y yo no soy representativo. Hay muy poca gente tan potente como para que resulten interesantes sus espacios personales durante una hora seguida. Y no es tan difícil ser ocurrente durante una hora y media. Es fácil, de hecho. Ahora tengo 35 años y veo la vida de otra manera. Me he dado cuenta de que lo que triunfa es lo que entiende el público general, no los que están obsesionados con el tema en cuestión, como yo lo estoy con la comedia.
¿Quieres escribir un buen monólogo? Dedica toda tu vida a aprender a escribir comedia y cava cada vez más profundo hasta que duela. Cuando todo esté fuera, elimina lo que solo te importa a ti y dale un brillo con la realidad más dura para que genere tensión y desemboque en risa. Tendrás dos opciones: ser Hannah Gadsby o morir de hambre.
¿Cómo vamos de humor en España en esta época tan convulsa?
Tenemos programas de humor increíbles. Sin duda, es la época de oro de los programas de comedia. Por suerte las audiencias ya no importan tanto y se pueden hacer cosas maravillosas. Como La Resistencia o el éxito de Susi Caramelo, mi amiga. ¡Me alegro mucho!
Pero sí que hay un problema con los monólogos… No sé qué pasa. No importan. Odio a la gente que dice: “Es que si quiero que me cuenten algo, veo una charla TED”… No entiendo esa comparación: es como comparar el rugby con el baloncesto porque se puede coger el balón con la mano. Sobre todo, teniendo en cuenta que las charlas TED graciosas usan chistes en formato “stand up comedy”.
Eres de Alcobendas… ¿por qué recomendarías descubrir Madrid y qué representa para ti la zona norte?
Para mí, Alcobendas es mi casa. No estoy tan cómodo en ningún sitio como ahí. Tengo muchas historias, mis primeros amores, mis primeras borracheras, mis grupos de amigos, las risas, ‘Emboys’, La Colonia Boxing… Alcobendas me lo ha dado todo y no me ha quitado nada. No recomiendo descubrir Madrid: Alcobendas y Sanse son la hostia. No necesitamos bajar a Madrid para nada. (Risas.)
Aunque ahora vivo en Malasaña en plan “cooltureta snob”, no es raro verme tomando algo en el Vanila Club Gastrobar, en el Almírez de Valdelasfuentes o en el Patrick´s de Ricky, llorando de risa con los chistes de mis amigos.
¿Y dónde podemos seguirte (en redes sociales) y verte actuando?
¡Claro! Aquí… Instagram: @charlieunderuno; Facebook: Charlie Under; Twitter: @charlieumder. Y verme… Estoy haciendo un show ahora mismo llamado “Los perros no hablan” en “La Estación Malasaña” todos los domingos por la tarde. ¡Venid si gustáis y degustad!
¿Algo raro o curioso que hayas visto en nuestra vibrante escena cómica?
La llegada de los “youtubers” a la escena cómica es algo raro para mí. No sé cómo gestionarlo. Son gente a la que admiro y odio a partes iguales. ¿Cómo puede un chaval desde su cuarto generar más visitas y contenido que cualquier empresa millonaria? Me deja alucinado. Lo flipo. Pero luego voy a su canal, veo sus cosas y pienso: “Pero ¿quién usa su tiempo en ver estas cosas?”. No sé… Creo que eso significa que me estoy haciendo viejo. (Risas.) En mi tiempo yo escuchaba rap a todo meter y mi padre me decía: “¡Pero si es gente hablando!”. Hay muchos shows ahora que mezclan “influencers” y cómicos. Ellos tienen a la gente y nosotros tenemos… ¡gracia!
¿Shows y cómicos de la actualidad que nos recomiendes? Tomamos nota…
Te voy a decir lugares porque es importante que la gente conozca el “underground” de Madrid para que esto crezca. Id a ver lo que hay en “La Estación Malasaña”, “Beer Station”, “Picnic”, el “Maravillas”, “Off La Latina”, “Teatro de las Aguas”, los “Luchana”… y más. Los sitios pequeños y el teatro Off están sufriendo mucho; y tienen muchísima calidad a un precio muy bajo. Si vais a ir, mirad las programaciones pequeñas también, por favor.
Una reflexión final o un deseo bienhumorado desde La Mirada Norte para los lectores, la gente risueña, un servidor y la humanidad entera…
Sí, me encanta Alcobendas. Las grandes avenidas, los edificios de máximo 4 plantas y la gente que lo puebla. Nunca había tenido la oportunidad de agradecer mi vida ahí, así que ¡gracias! Cuando digo “mi barrio” hablo siempre de vosotros. De nosotros. Deseo que todo el mundo que está sufriendo por cosas de este puto virus pueda retomar sus vidas. Voy a romper una lanza por los pequeños empresarios con punto de venta necesario, así como restaurantes, bares, escape rooms, academias, gimnasios, etc. Están siendo los grandes sufridores y no se lo merecen. Los pequeños empresarios son muy valientes. Porque para emprender y jugarte tu dinero y el dinero de tu familia en un negocio hay que serlo, mucho más que para subirse a un escenario. Acordémonos de la pequeña empresa, de ese autónomo societario que se ha quedado en el vacío sin que haya nadie ayudándole.
¡Fuerza, amigos! Gracias, amigo Jorge, y mucha suerte.
¡Muchas gracias, ánimo y viva la comedia!
El periodista y comunicador Jorge García Palomo nos presenta a todo tipo de personas genuinas, creativas, curiosas, contingentes y necesarias… Como diría aquel genio, “gente loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo”… Sí, son “Otras miradas”. Y están entre nosotros.