Radiografía del candidato a la alcaldía: ¿Qué es lo que más valoran los electores de un alcaldable?
Aquellos que se posicionan por encima de marcas y con un perfil cercano y con capacidad de gestión son los que más confianza generan.
Irene Núñez

Un candidato se dirige a un acto de campaña. De camino, paseando por el centro de su ciudad, le paran unos vecinos: “¡Tú eres el alcalde! El que vivía por Parque Blanco, ¿no? Es que te quería preguntar que cuándo terminan las obras de Constitución”. El candidato contesta y empieza una charla animada. Luego, prosigue su recorrido, pero, apenas unos metros, vuelven a llamar su atención. Ahora es una mujer que quiere darle las gracias por haberla informado personalmente de la bolsa de empleo municipal. Se forma corrillo a su alrededor. Ha llegado un grupo de niños -que acaban de salir del cole- y que quieren saludarle. Hace unos días les enseñó el Ayuntamiento y “la sala de las Meninas”, les explican a sus padres. Éstos aprovechan para trasladar alguna queja; que qué se puede hacer para evitar la doble fila en las entradas y salidas al Lorca. Sigue caminando. Una pareja de jubilados, sentados en una terraza, le chistan. Quieren saber cuándo es el próximo baile en La Esfera. Mientras contesta, siente un pellizco en el brazo; un vecino que sale del bar y le reconoce inmediatamente: “¿Para cuándo están los pisos de Valgrande?”. Y el camarero, que sale a tomar nota, también saluda, agradecido por los casi 7.000 euros de ayudas al pequeño comercio que se han dado en esta legislatura y que han salvado su negocio. El candidato ve a un conocido dentro del local y accede. Y al final, termina saludando a toda la clientela. Alguno que otro le asegura que “aunque no soy de tu partido, a ti te voy a votar” o “gracias por contestarme por Facebook, se nota que estás siempre al quite de todo”.
Esto podría ser un breve resumen de un día cualquiera (no solo en campaña) de un candidato. Pero no de cualquier candidato; tiene que ser de alguien reconocido y valorado por su capacidad de gestión entre los vecinos. De alguien cercano (que eso del “cara al público” le apasione); de alguien de Alcobendas de toda la vida, que conozca cada una de las realidades y que cuente con un proyecto que tenga la confianza de una amplia mayoría más allá de siglas o ideologías.
La proximidad, la habilidad para gestionar y el conocimiento son los ingredientes imprescindibles que luego permiten cocinar una buena estrategia de campaña y planificar menús durante todo un mandato. Al menos, esas tres cualidades son las que más confianza generan y valoran los electores a la hora de elegir a quién quieren tener al frente de su ayuntamiento. Así lo demostró el socialista José Caballero. Fue el alcalde que más años ha gobernado Alcobendas, 24. Un hombre cercano, empático, que desarrollaba su acción política en la calle, con el contacto diario con los vecinos. Su proyecto transformó Alcobendas en la ciudad que hoy todos conocemos. La hoja de ruta de un buen candidato o candidata tiene que pasar por ahí: tener un proyecto local con vocación transformadora, proximidad con el vecino y capacidad de gestionar. El 28 de mayo tenemos una cita con las urnas. Se celebran elecciones locales y, puesto que la mayoría de siglas que concurrirán son por todos conocidas, debemos hacer parte de nuestros deberes como vecinos y vecinas, como preocuparnos en conocer los perfiles y las personas que se presentan. Hacer una apuesta por aquellos candidatos que se van a poner la camiseta de Alcobendas y no la de su partido para proseguir la senda de la transformación. Eso es hacer verdadera patria chica.
Irene Núñez/Coordinadora de Comunicación del Gabinete de Vicealcaldía y del PSOE Alcobendas