Presentación del Dakar 2025: se celebrará del 3 al 17 de enero
En su sexta incursión en Arabia Saudí, se mantiene el nivel de dificultad entre Bisha y Shubaytah, con casi 8.000 kilómetros de carrera, de los cuales 5.000 corresponden a especiales.
G. Pico Pérez
El conocimiento profundo del país ha permitido a la organización trazar un desafío mayúsculo de principio a fin que incluye algún momento de respiro aquí y allá para que los pilotos y sus equipos recuperen el resuello. El durísimo formato de la 48h chrono figura este año al inicio de la prueba, seguida casi de inmediato de una etapa maratón cuyo desenlace se antojará, posiblemente, determinante.
Durante la segunda semana, el foco estará puesto en Shubaytah, el gran hito a alcanzar tras dejar atrás el mar de dunas del Empty Quarter.
El amor por el detalle ha llevado a la organización a desdoblar los trazados de las especiales (en más del 45 % del kilometraje total), una fórmula destinada tanto a mejorar el confort y la seguridad de los pilotos como a complicar la navegación a los coches. Cabe destacar que la carrera se decidirá también en los propios vivacs, que serán el escenario tanto de pistoletazos de salida, como de llegadas y del podio final del próximo 17 de enero en Shubaytah.
Cita en Bisha
La instalación de un vivac XXL capaz de congregar en un mismo lugar a todos los colectivos del evento los días previos a la carrera conquistó a los locales a orillas del Mar Rojo en 2023, como ocurriría un año después, en 2024, en el imponente decorado de AlUla.
Y no hay duda de que lo mismo sucederá en Bisha, una localidad de 200.000 habitantes situada en el cuarto sudoccidental de Arabia Saudí, donde desembarcarán la gran mayoría de los competidores tras recuperar sus vehículos en el puerto de Jeddah. Los reencuentros continuarán con la llegada del año nuevo, que arrancará con el fin de las verificaciones técnicas y administrativas, así como los últimos preparativos. Todo ello en una tierra que constituye un rico oasis…
David Castera
El director del rally ha desvelado los detalles de la 47ª edición del Dakar, que cita a los campeones y amateurs del universo del rally raid en Arabia Saudí por sexto año consecutivo. Del 3 al 17 de enero del año que viene, los pilotos se enfrentarán a un prólogo y 12 etapas, entre ellas el desafío de la crono de 48h, además de una etapa maratón, seguida de una travesía por el Empty Quarter antes de la traca final en Shubaytah.
En total, los competidores que tomen la salida en Bisha se enfrentarán a una distancia de unos 7.700 kilómetros, 5.100 de ellos de lucha contra el reloj. Por primera vez, cinco etapas han sido trazadas en recorridos separados para los vehículos FIM y FIA, véase el 45 % del total de los sectores cronometrados.
Los campeones del mundo de W2RC Ross Branch y Nasser Al Attiyah figuran respectivamente en lo alto de las listas de inscritos en FIM y FIA, que incluyen un total de 340 vehículos.
Al margen de la carrera principal, el Dakar Classic acoge a 76 coches y 19 camiones históricos que se enfrentarán a un reto de regularidad, mientras que el desafío Mission 1000 permitirá a cinco vehículos poner a prueba sus innovadoras tecnologías en el terreno del rally.
Los primeros días del Dakar 2025 servirán también de trampolín para una nueva generación de pilotos saudíes seleccionados en el marco de la operación “Saudi Next Gen”, que brindará acceso a la edición 2026 al equipo que brille con más fuerza.
La probaron, les gustó y quieren repetir. En 2024, los pilotos del Dakar descubrieron el formato de la crono de 48h, una etapa XXL que se extiende durante dos jornadas con la obligación de apagar los motores con la puesta del sol y que reparte a los pilotos en zonas de descanso minimalistas perdidas (o casi) en mitad del desierto saudí.
En la edición de 2025, este desafío mayúsculo vuelve a figurar en el menú del rally en un formato cocinado a fuego lento que promete dejar huella: una ración de kilometraje más generosa (FIM, 958 km / FIA, 971 km), platos (terrenos) más variados durante los dos días y, sobre todo, un exigente timing a partir del tercer día de carrera. Las dificultades se encadenarán después sin apenas tregua para los corredores, que deberán hacer gala de rendimiento y prudencia durante la etapa maratón previa a la jornada de descanso del 10 de enero en Ha’il, el corazón del rally todo terreno en Arabia Saudí.
Ahora bien, nada estará decidido en el ecuador de la carrera, pues la segunda semana tiene reservado un menú cuando menos copioso para los pilotos. Precisamente en este segundo acto se concentran gran parte de las especiales trazadas en itinerarios diferentes para las categorías de motos y de coches, una separación que arroja beneficios múltiples para sus protagonistas.
Al reducir las situaciones propensas a los adelantamientos, se maximiza la seguridad y, en términos deportivos, los trazados paralelos obligan a los copilotos a velar por la navegación sin la “ayuda” de las huellas de las motos, permitiendo al mismo tiempo que los coches salten a la pista con los primeros rayos del sol. Se aleja pues la perspectiva de rodar de noche en las dunas, aunque los últimos días de carrera en el Empty Quarter servirán a todos en bandeja un océano de arena, sobre todo en la 11ª y anteúltima etapa, de manera que no debemos descartar las sorpresas y vuelcos en la tabla en el gran bucle de Shubaytah. La última etapa, con una salida clásica en línea, promete ser un bonito y fulgurante desfile nuevamente hacia Shubaytah, rumbo a una meta final que se disputará por primera vez en pleno corazón del vivac.