Opinión

La Feria del Libro de Alcobendas

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Las llamadas Ferias del libro tienen su origen el siglo XVI, siendo al principio encuentros muy reducidos entre amanuenses, nobles y representantes de órdenes religiosas; con un número muy reducido de libros, puesto que en aquella época la producción no podía ser muy extensa.

Rosario Tamayo

También se podían adquirir en ellas otros productos como tinta o papel, así como objetos de lujo, pieles o sedas.

En Europa destacaban las ferias del libro de Frankfurt, Leipzig o Lyon. En España era especialmente importante la de Medina del Campo, un gran centro comercial donde estaban instalados los más destacados mercaderes de libros y donde se hallaban los mayores depósitos de papel, convirtiéndose así en el más interesante punto de importación de obras procedentes del extranjero, que llegaban en resma y sin encuadernar.

Las Ferias fueron cambiando de formato, organizándose con el paso del tiempo más para la venta al público que en torno a los tratos editoriales.

La Feria del libro de Madrid comenzó en 1933, en el paseo de Recoletos.

Sobre aquellas primeras casetas, pintadas de diferentes colores, se colocaban altavoces no solo para oír el día de la inauguración los discursos de las autoridades, sino también a los escritores del momento que, durante la semana, iban tomando la palabra ante el micrófono situado frente a la iglesia de San Pascual.

Tras la Guerra civil la Feria del Libro no se convocó hasta 1944 y en 1967 se desplaza desde el Paseo de Recoletos al parque de El Retiro.

En plena primavera hemos celebrado en Alcobendas una Feria del Libro que ha sido todo un éxito tanto para los lectores como para las editoriales, los libreros y los autores. Los vecinos han disfrutado del parque de Cataluña, donde estaba instalada, así como del sol y de la literatura.

Por las 16 casetas han pasado a lo largo de tres días más de cincuenta autores, ¡y más de cuatro mil visitantes! Todo ello con la garantía de los necesarios protocolos sanitarios. Una iniciativa que queremos tenga continuidad y se convierta en una tradición en Alcobendas, de forma que llegue a formar parte de la marca cultural de nuestra ciudad.

Porque celebrar la literatura al aire libre responde a uno de los principales objetivos que me marqué cuando asumí la Concejalía de Cultura: Hacer que la Cultura saliese a la calle, a los parques, a las plazas y jardines, al encuentro de los vecinos en su día a día.

Además, una Feria del Libro permite algo tan importante como es el contacto entre el autor y sus lectores. También es especialmente importante acercar la literatura a los niños, así numerosas casetas de nuestra feria permitían dar a conocer a padres y a hijos lo más destacado de la literatura infantil de actualidad.

El hábito de la lectura es más fácil adquirirlo desde la niñez. Además de ser un gran placer, leer supone múltiples beneficios, ya que mejoramos nuestro vocabulario, nuestras habilidades de expresión escrita, estimulamos nuestra creatividad y desarrollamos nuestro cerebro.

Quiero agradecer, especialmente, a los equipos de las Mediatecas de Alcobendas el gran esfuerzo y trabajo que han dedicado a preparar la Feria del libro de nuestra ciudad para que todo fuera seguro desde el punto de vista sanitario, y también para que tuviera la suficiente diversidad y atractivo en su oferta.

Como dijo Mario Vargas Llosa: “Aprender a leer es, seguramente, de lo más importante que nos ha pasado en la vida”.

No dejes nunca de leer.

¡¡Te esperamos en la Feria del Libro de Alcobendas del 2022!!

Rosario Tamayo/concejal de Cultura Alcobendas