Relojes que triunfaron este año, puros objetos de deseo
Son los relojes más espectaculares del año por muchas razones, aunque los argumentos de mayor peso es que son alucinantemente bonitos y altamente deseables.
LMN
Son los relojes más espectaculares del año por variadas y diferentes razones: por su cualidad de joya o reloj secreto, por su mecanismo minúsculo de alta precisión
Por su arquitectura, su novedad o intemporalidad. Aunque el argumento de peso es que son alucinantemente bonitos e increíblemente deseables. Y aunque alguno de ellos pueda salirse de nuestro presupuesto, siempre podemos admirarlos como lo que son: obras de arte
Carat 128 oro blanco y diamantes de Tiffany & Co
Porque lo hemos visto en la nueva boutique que la famosa casa neoyorkina —inmortalizada en ‘Desayuno con diamantes’— ha abierto en el 72 de la madrileña calle Serrano y su belleza nos ha mareado. Tiene una caja de oro blanco con 255 diamantes redondos talla brillante, una esfera en pavé de 382 diamantes redondos, un brazalete con cinco hileras de diamantes de diferentes tallas y una corona con nueve diamantes redondos talla brillante. Precio: 615.000 euros.
Reine de Naples 8918 Mint de Breguet
Porque es el primer reloj de pulsera de la historia y lo creó el padre de la relojería contemporánea en 1810 para la reina Carolina Murat, una de las hermanas pequeñas de Napoleón. Y porque esta nueva versión tiene atractivos que la hacen única: una caja de oro blanco con diamantes (incluido uno de talla briolette en la corona), una esfera de nácar con diamantes en engaste nieve y un diamante talla pera. Números en verde menta a juego con la correa de piel. Precio: 54.300 euros.
Van Cleef Lady Arpels Brise d’Été
Aunque todo es absolutamente sublime en este reloj de oro blanco y diamantes, lo más fascinante es que las mariposas que figuran en la esfera de esmalte indican la hora, dispuesta en abanico para una indicación retrógrada, y revolotean a demanda (presionando en el pulsador a la izquierda de la caja) a merced de una suave brisa que mece las flores. Precio: CPV.
Royal Oak Mini de Audemars Piguet
Porque se puede elegir entre tres versiones monocromas realizadas en uno de los tres colores clásicos de oro en acabado Frosted.
Pero también porque con sus 23 milímetros de diámetro, reinterpreta el modelo homónimo de 1997 y celebra las proezas de miniaturización y diseño desempeñadas en la relojería femenina desde hace dos siglos. Y además su mecanismo tiene una autonomía de ocho años. Precio: 34.600 euros.
Cut de Hermès
Nos encanta este reloj de acero y diamantes porque, como en todas las creaciones de la casa, su diseño es tan lujosamente relajado que se nota que es Hermès a metros de distancia. Por eso y por su particular caja redondeada, la tipografía de los números, la corona desplazada a la 1:30 horas y la gama de correas de caucho en ocho de los colores de la casa. Precio: 5.400 euros.
PRX Powermatic 80 de Tissot
Porque es todo un fenómeno de ventas y de estilo ochentero. Porque reproduce las dimensiones exactas de un reloj de 1978 que parece que lo hemos heredado de nuestro padre. Porque está realizado en acero y PVD de color amarillo, y da el pego; parece de oro, pero te habrás gastado una fruslería en él. Precio: 895 euros.
Cubitus de Patek Philippe
Cubitus es la nueva colección de la firma ginebrina en veinticinco años desde que presentara el modelo femenino Twenty-4. Nos rechifla porque ha sido creada y bautizada por el propio CEO, Thierry Stern, y porque es deportiva y elegante y ligera y joven y, sobre todo, cuadrada. De los tres relojes de la nueva colección, el que más nos ha gustado es este de aire setentero en acero y oro. Precio: CPV.