‘Missing’ explota el juego de los posibles sospechosos y muestra el poder de la tecnología

Todo vale, todo formato es bueno para explicar una historia. Incluso si son aquellos curiosamente el que han alejado de las salas al público objetivo de dichas propuestas para individualizar a través de redes o plataformas lo que antes era una experiencia colectiva. Y esta película tiene suficientes atractivos para la gran pantalla.

BettyGS

La efectividad de ‘Missing’ está fuera de toda duda. De hecho, vendría a ser una continuación espiritual de ‘Searching’ en cuanto al formato, y al género (thriller). Si allá era un padre desesperado por encontrar a su hija desaparecida, aquí es una joven la que debe encontrar a su madre. Ambas comparten también los secretos que se esconden tras la fachada digital, y parten de una tragedia familiar para buscar la conexión emocional.

Pero realmente no es necesario haber visto la anterior para disfrutar (y sufrir en el término literal del verbo) de y con ésta. Y en el apartado formal, ambas mantienen las constantes narrativas y de planificación, siendo conscientes del límite que supone la apuesta por este formato.

Pero aquí hay más de todo. Primero, nos muestra cómo, en cinco años que separan a una y otra, ha avanzado la tecnología, y las nuevas posibilidades que ofrece. Lo que queda claro es que miedo da comprobar que a través de Internet se puede saber todo, absolutamente todo, de cualquiera de nosotros.

Sinopsis

June (Storm Reid) tiene una bonita relación con su madre Grace (Nia Long), por ello, cuando su madre dejar de contestar a sus mensajes y llamadas mientras está de viaje con su novio por Colombia, June se asusta y denuncia su desaparición. La joven tendrá que luchar por encontrar a su madre a pesar de los continuos obstáculos que encuentra. June tendrá que hacerlo todo desde los Ángeles, pero utilizará las tecnologías que tiene cerca para intentar hallar respuestas, al tiempo que va descubriendo secretos de su madre.