Beneficios de escribir a mano

Cada vez es menos frecuente que escribamos a mano en un papel. Las nuevas tecnologías vienen pisando fuerte, y los ordenadores, las tablets y los móviles, han hecho que dejemos de lado bolígrafos, lapiceros, plumas y rotuladores, y demos paso a las teclas.

Blanca Rodríguez Ayala

Y aunque los dispositivos es cierto que nos facilitan muchas actividades de nuestro día a día, y nos ahorran tiempo, es importante no olvidar la escritura, e incluso incentivarla, sobre todo entre los más pequeños de la casa, ya que fomenta su desarrollo, al tiempo que tiene importantes beneficios para la salud a todas las edades.

Desde la infancia es fundamental aprender el arte de escribir de una forma correcta, ya que simplemente el gesto de coger bien un lápiz ejerce grandes beneficios sobre nuestro cerebro. En la etapa adulta, no son pocas las cosas favorables que nos aporta, entre ellas la activación de diferentes zonas del cerebro manteniéndolo “joven”:

1. Desarrolla la psicomotricidad y la destreza al tener que utilizar las manos, reforzando la coordinación mediante la activación del área motora.
2. Mejora la memoria y el aprendizaje al almacenar en la mente el texto que estamos escribiendo, y el hecho de recordarlo posteriormente.
3. La vista trabaja, ya que debe de seguir el trazo de la mano, facilitando a su vez el parpadeo, lo que previene algunas patologías oculares, como el Síndrome del Ojo Seco, muy habitual por el excesivo uso de las pantallas.
4. El razonamiento y la lógica también se ejercitan puesto que hay que expresar cosas coherentes para dar sentido a lo que escribimos mediante la unión de las letras, provocando que el cerebro trabaje asociando ideas y pensamientos antiguos, presentes y futuros.
5. La capacidad de concentración también se ve favorecida, al tener nuestro foco principal proyectado en lo que queremos escribir.
6. El aprendizaje se enriquece, pues la información que queremos transmitir conlleva un proceso de ideas que muchas veces nos obliga a consultar otras cosas para hacernos entender de la mejor forma posible.
7. Es una actividad relajante, incluso escribiendo cosas que no son del todo placenteras ni agradables, el simple hecho de expresarlas plasmándolas en un folio, resulta terapéutico por el alivio que nos deja después.
8. La creatividad y la imaginación despiertan si tenemos grandes ideas, si queremos expresarnos de una manera original, o simplemente mostrar algo a los demás con palabras que les lleguen.

En general, el arte de escribir desarrolla las áreas cerebrales durante el crecimiento, favorece un desarrollo adecuado, mantiene joven y sano el cerebro, evita su degeneración cuando nos hacemos mayores, ralentizando la posibilidad de padecer enfermedades de tipo degenerativo, y alivia el estrés y la ansiedad, además de mejorar el estado de ánimo, y fomentar las relaciones interpersonales.

Doctora Blanca Rodríguez Ayala