La OCU alerta de facturas de gas anormalmente elevadas
Al no poder realizar lecturas en los domicilios se están emitiendo facturas estimadas con repuntes de hasta 300 euros
Según ha puesto en conocimiento la Organización de Usuarios y Consumidores, en los últimos días han recibido numerosas reclamaciones de hogares con facturas del gas anormalmente elevadas.
El problema parece ser causa de ser facturas estimadas, ya que el estado de alarma impide al personas encargado acudir a los domicilios. Por este motivo y al no estar basadas en una lectura real pueden resultar mucho mayores que las habituales en esta época.
Ante esta situación, desde la OCU denuncian el perjuicio que estas facturas pueden suponer para aquellas familias afectadas por una reducción de sus ingresos a causa de la crisis del coronavirus.
En algunos casos supone un aumento de 300 euros
Entre las reclamaciones recibidas, según la OCU, destacan algunas facturas en las que la estimación supone un desvío de más de 300 euros del consumo habitual.
Obligaciones de las distribuidoras en estos casos
La organización recuerda también que la normativa contempla que la distribuidora, en el caso de que no sea posible realizar la lectura del contador y que el consumidor no facilite su propia lectura, debe realizar una estimación teniendo en cuenta el consumo en esas mismas fechas en años anteriores, y si no hay histórico por tratarse de altas recientes, se debe realizar teniendo en cuenta un perfil medio establecido.
Así mismo, estas estimaciones deben ser realizadas por la distribuidora y comunicadas a las comercializadora para que sean así reflejadas en las facturas.
Respecto a las facturas recibidas, algunas de las reclamaciones recibidas señalan, según la OCU, el origen del problema en no haber tenido en cuenta la lectura realizada por el consumidor y puesta en conocimiento de la distribuidora por alguno de los medios que esta pone a disposición de los clientes.
Cargo ya realizado en muchos casos
Sea cual sea el origen de estas elevadas estimaciones, el problema, matizan desde la OCU, es que en la mayor parte de los casos, el cargo se ha realizado ya por domiciliación bancaria, y la única solución facilitada por las comercializadoras ha sido la de abonar la factura ahora para que, dentro de dos meses, en la próxima factura con lectura real se realice el ajuste con la devolución. Este retraso no soluciona el problema a las familias más desfavorecidas.
Peticiones de la OCU
– A las comercializadoras que resuelvan positivamente todas y cada una de las reclamaciones que sus clientes planteen ante facturas estimadas erróneas ya sea anulando esas facturas y emitiendo una nueva con la lectura facilitada por el cliente o prorrateando su pago mientras no haya lecturas reales.
– A las distribuidoras que incorporen de forma ágil todas las lecturas hechas por los consumidores a través de los diferentes canales.
-Tanto a las distribuidoras como a comercializadores, que, a falta de una normativa más precisa, revisen la metodología aplicada, para aprovechar al máximo la información del cliente disponible hasta ese momento., de forma que las recurrentes quejas con las estimaciones sean reducidas al máximo.
– Así mismo exige a las comercializadoras que cumplan lo establecido en el artículo 51 de Real Decreto 1434/2002, de 27 de diciembre, por el que se regulan las actividades de transporte, distribución, comercialización, suministro y procedimientos de autorización de instalaciones de gas natural que obliga a que las cantidades adelantadas por facturaciones elevadas, sean devueltas con el interés legal del dinero vigente y que en el caso de estimaciones a la baja, su cobro, será prorrateado en tantas facturas como meses transcurrieron en el error.
– OCU recomienda a los consumidores afectados que no puedan hacer frente al pago de la factura que reclamen el fraccionamiento de la misma.
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