Cultura y entretenimiento

Javier Arcenillas “Soy un contador de historias imposibles”

Compartir
Galardonado con el World Press Photo 2018, este gran fotoperiodista con un obturador en la retina es licenciado en Psicología Evolutiva por la Universidad Complutense de Madrid y ha publicado varios libros. Su cámara irradia humanismo, sensibilidad y crudeza.

Por Jorge García Palomo

Su mirada es aparentemente seria, pero brilla con insólita inocencia cuando se ríe. Todoterreno y poliédrico, Javier Arcenillas (Bilbao, 1973) es un fotógrafo superlativo porque ha ganado algunos de los premios más importantes del mundo y, sobre todo, porque convierte cualquier imagen en puro arte visual. Y lo hace con una facilidad pasmosa. Nuestro entrevistado también ha colaborado con multitud de medios de comunicación y forma parte del diccionario de fotógrafos españoles. Ahí es nada.

Galardonado con el World Press Photo 2018, este gran fotoperiodista con un obturador en la retina es licenciado en Psicología Evolutiva por la Universidad Complutense de Madrid y ha publicado varios libros. Su cámara irradia humanismo, sensibilidad y crudeza. Ha plasmado momentos en campos de refugiados, momentos con sicarios, momentos de un sinfín de realidades que ojalá no existieran.

Seguro que lo saben bien sus alumnos de fotografía documental de la Escuela Internacional PIC.A de Alcobendas, ciudad donde Arcenillas suma ya 25 años trabajando, volcando su pasión por la imagen hasta en los proyectos más prosaicos y evocando a referentes como Robert Frank o Don McCullin.

¿Quién es Javier Arcenillas?

Soy un contador de historias imposibles.

¿Tu mejor fotografía?

No tengo ninguna especial…

¿Seguro? ¿Por qué?

Porque dedicarme a ser fotógrafo es una recompensa lo suficientemente buena. Es una profesión maravillosa que te permite conocer gente y entender a las personas. Puedes observar el mundo y eso ya es mágico.

¿El mejor premio?

Supongo que el mejor premio es poder contar historias, morir mirando…

¿Cómo te gusta mirar la vida?

Con ilusión y optimismo en un mundo de realidades muy turbias.

¿Qué es lo que más te apasiona de todo lo que haces día a día?

Poder enseñar, compartir y dialogar.

¿Alguna curiosidad que quieras compartir sobre alguno de tus proyectos?

Bueno, desgraciadamente no todo es bonito. Por el trabajo que desarrollo no me contratarían como embajador de turismo en muchos sitios. En ocasiones, me han pegado, detenido, robado, amenazado, disparado, agredido e increpado. Aguanto todo eso porque muchas personas necesitan que se cuenten sus historias. Al final, la mirada de los fotógrafos se convierte en la voz de los hechos.

¿Qué noticia te gustaría leer o qué foto te gustaría hacer?

El final de esta cuarentena. Necesitamos abrazos, Jorge. Cuanto más lejos estamos los unos de los otros, más necesitamos el calor humano.

@jorgegpalomo