Cultura y entretenimiento

‘Hasta el fin del mundo’ autoría total de Viggo Mortensen en un extraño western romántico

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Una película interesante, con una estética realista y un ritmo pausado, intrigante a ratos, pero que no conmueve, aunque aborde sensaciones fuertes. El actor escribe, dirige y protagoniza esta magnífica historia con reminiscencias de ‘Sin perdón’ y ‘El fuera del la ley’.

Que el actor-director (también guionista y en la banda sonora) haya terminado en territorio western se revela como consecuente con todo lo apuntado ya en su debut (‘Falling’ (2020), ópera prima), en especial porque en este universo donde conviven mitología e historia (leyenda y verdad, según John Ford) sigue explorando el discurso sobre el héroe ausente, un hogar defendido por una mujer fuerte y resolutiva (el personaje de Vicky Krieps, la verdadera protagonista y heroína), encontrará una suerte de redención y de asunción de su imagen fuera de encuadre.

‘Hasta el fin del mundo’ es esa odisea de un hombre desarraigado vista desde su mujer, la única que de verdad construye un futuro en una nueva América despiadada, racista y misógina. Viejo/Moderno Oeste donde una tumba puede significar una esperanza, y donde un río es el punto de bautismo sanador del hombre western.

‘Hasta el fin del mundo’, western donde su ‘héroe’ no dispara ni mata a nadie, pero donde la violencia existe y es cruelmente cruda (la violación), se mira en dos de Clint Eastwood: ‘Sin perdón’ (1992) con su pistolero atormentado, y ‘El fuera de la ley’ (1976) con su viaje hacia las paces con los demonios internos gracias a la fortaleza y determinación femeninas. 

Viggo Mortensen sabe manejar los tipos y arquetipos del género dándoles un toque genuinamente europeo, con la mujer coraje que hace de la segunda película como director del actor una joya.

Sinopsis

Ambientada en Estados Unidos en la década de 1860, ‘Hasta el fin del mundo’ cuenta la historia de Vivienne Le Coudy (Krieps) y Holger Olsen (Mortensen). La primera es francocanadiense y el segundo danés, y sus respectivas historias se cruzan cuando se conocen en la ciudad de San Francisco. Cuando posteriormente se trasladan a una zona remota de Nevada para iniciar su vida juntos, sus diferencias salen a la luz: Holger parece conformarse con vivir una vida sencilla, mientras que Vivienne quiere aportar vitalidad a su rutina. Debido a sus roces, él desaparece de su hogar durante varios años, dejando que su esposa sobreviva por su cuenta en una ciudad marcada por la corrupción y la insensibilidad: algo que amenaza lo que han construido. Sin embargo, un incidente hará que todo cambie y forzará que ambos se reencuentren.