Carlos Sainz (61 años) gana su 4º Dakar y lleva a Audi a la gloria y Cristina Gutirrez (31 años) en la categoría Challenger demostrando su talento
A la edad en la que la mayoría de los conductores empiezan a perder aptitudes para el volante, un hombre fuera de serie nos acaba de demostrar qué si quieres, puedes. Pero está bien decir esa sentencia, aunque sólo se la crea Carlos Sainz. Lo mismo que Cristina vencedora en su categoría por segundos.
Manuel Vega
Hace sólo unas horas, aunque desde ayer tenía el trofeo ganado, que “El Matador” conseguía una victoria en la que sólo èl – y suponemos que Audi- creía. De esta manera, se convirtió en el primer piloto en lograrlo con un coche electrificado e híbrido, siendo además el único en haber ganado con cuatro marcas distintas y ostentando el título del piloto más veterano en conseguir tal hazaña.
Llevamos unos meses en comunicación con el piloto madrileño y siguiendo el desarrollo del Audi, al que en su día calificamos de “extraterrestre” por la imagen que nos transmitía. Entendíamos poco de sus virtudes pero todo lo que se intuía era el trabajo tremendo que estaban haciendo los alemanes y sabíamos la preparación tremenda de Carlos para ponerse físicamente a la altura del Dakar más duro de la historia. ¿Dónde han quedado aquellas ediciones en las que un Nissan Patrol podías llegar a ver el mar en las playas de Dakar?
El triunfo de Sainz en este Dakar ha sido contundente, pues el español logra el triunfo con una ventaja de más de 1 hora y 20 minutos sobre el belga Guillaume de Mevius (Toyota), que fue segundo clasificado por delante de Loeb, que acabó en el tercer escalón del podio.
Sainz, que no ha logrado ninguna victoria de etapa en este rally, ha sido el más regular de los pilotos y eso le ha permitido sumar su cuarto triunfo, tras los conseguidos en 2010, 2018 y 2020.
El piloto madrileño y su copiloto Lucas Cruz dieron una exhibición de pilotaje y fueron protagonistas en las etapas más complicadas.
Quedaron segundos de una primera jornada llena de piedras y pinchazos. También fueron segundos en la sexta etapa, una crono de 48 horas por el mayor desierto de arena del último y terceros en el penúltimo día, otra maratón de piedras en la que Sainz bajó el ritmo tras ver la avería de Loeb, consciente de que ya nadie podría acercarse a sus tiempos de la general.
Una estrategia de diez, fruto de su ambición y veteranía, que le han servido para agrandar su palmarés en el que, además de los cuatro Dakar, destacan sus dos campeonatos del mundo de rallies.
Además, con este cuarto triunfo en el Dakar 2024, Carlos Sainz se sitúa entre los mejores pilotos de la prueba y que más veces la han ganado. Con sus cuatro triunfos iguala al finlandés Ari Vatanen, que tiene cuatro Rally Dakar en su palmarés y ocupaba el tercer cajón del podio. Por delante están Nasser Al-Attiyah y Stéphane Peterhansel.
¿Hasta cuándo, Carlos?
Cristina y su hazaña
La gran noticia del día era la cuarta victoria de Carlos Sainz en la carrera más dura del mundo, pero quizá lo más emocionante llegaba por detrás, puesto que Cristina Gutierrez estaba muy cerca de conseguir el triunfo en la categoría Challenger, pero faltaba ver los resultados finales, ya que Mitch Guthrie estaba bastante cerca después de sus problemas en la última especial, para llegar a Yanbu.
Finalmente, con mucha emoción y tensión, tras una pequeña espera en la meta después de completar los 175 kilómetros cronometrados, se proclamó vencedora por unos pocos de segundos y desató la locura en Arabia Saudí, entre las asistencias, los periodistas y todos los ayudantes que allí estaban presentes.
Tras proclamarse ganadora, estas fueron las palabras de la española: «Estoy muy contenta, tengo que dar las gracias a todo mi equipo, a mi familia, a Red Bull, es un sueño hecho realidad».
Poco se sabe de Cristina. Nació en Burgos en 1991, y desde muy niña su pasión es sin duda el motor, algo que le trasmitió su padre desde pequeña. Explicaba en sus redes sociales que ya con 4 años había una minimoto en su casa que le produjo mucha curiosidad. Su padre era un enamorado del mundo del motor, y ella, a pesar de ser odontóloga y ejercer en la empresa familiar, no ha podido bajarse del asiento de piloto.
También tiene una parte solidaria y colabora con alguna ONG, como Tempoko. Incluso se ha escapado a Uganda para trabajar como dentista en orfanatos. Entre sus pasiones están el fútbol, el baloncesto, el tenis y el golf, además de viajar. Le gusta divertirse con sus amigos y más comer que cocinar. No se siente muy diferente a cualquier otra mujer de su edad, a pesar de que ha sido la segunda mujer en la historia que ha conseguido ganar en cualquiera de las categorías del Rally Dakar, tras la alemana Jutta Kleinschmidt, que se alzó con la victoria en la categoría reina en 2001.